Esta canción era una de varias de un musical de 1937, "Babe in Arms"
de los superconocidos Rodgers y Hart. Para ser una canción de amor ya resultaba un tanto extraña, ya que habla de la risible apariencia física de la amada, de su figura alejada de los cánones griegos, de su boca poco agraciada y que no dice cosas inteligentes, y a pesar de todo se convirtió en una de las baladas más grabadas del siglo pasado. Resulta fácil de tocar con el saxo si no se pone uno a hacer uno cosas cómo Miles Davis, y a mí, como me gusta esta pieza, me llega a salir decentemente.
Dos trompetistas trataron de hacer suya esta canción, Miles Davis y Chet Baker. Se suele acusar a Baker de seguir los pasos de Davis pero en este caso fue Baker el primero en identificarse con este estándar y el que más años lo mantuvo en su repertorio. Llegó a grabar cerca de 40 versiones. A principios de los años 50 pocos músicos tocaban My Funny Valentine, pero tras el éxito de Baker, tanto instrumental como vocal, muchos músicos de apuntaron al carro. En 1954 se grabaron más versiones que en las décadas de los 30 y 40 juntas.
Cómo escuchante clásico, a mí me gustan más la versiones de Chet Baker que las de Miles Davis. E incluso más, las versiones de Ben Webster, o Artie Shaw. En las canciones me gusta reconocer la melodía y poder seguirla, cosa que es difícil con Davis. Quizá para tocar la pieza se disfrute más con la versión de Davis, pero para escucharla prefiero la de Baker.
Voy a empezar con una versión de Chet Baker en vivo en Turin en 1959 y otra en Tokio en 1987 unos meses antes de morir en Ámsterdam al caerse por la ventana ayudado por todo lo que se había metido. Se nota claramente como el paso de los años no le había tratado bien. Demasiadas drogas y los peligros que ello conlleva, como el que le apalearan una vez en que las estaba buscando y le dejaron prácticamente sin dientes. Esta versión, que es larga, viene estupenda para un momento romántico en una sala de las de antes, tomando un whisky y un cigarrillo, acompañado de tu pareja, en un ambiente en penumbra. Vamos un momento para recordar.
1959
1987
En 1953 Frank Sinatra utilizó la canción para abrir su LP Songs for Young Lovers y esto fue decisivo para que My Funny Valentine saliese de la subcultura del jazz y aterrizase en los tocadiscos del estadounidense medio. Creo que en el video le acompaña su hija Nancy antes de hacerse famosa con "Las botas hechas para caminar". Más que nada porque se parece bastante a Sinatra y me recuerda a la del video de esa canción.
Y como canta el c..... Es acongojante la voz que tenía La Voz.
Iba a poner la versión del Quinteto de Miles Davis en 1964, con Wayne Shorter al saxo tenor, Herbie Hancock al piano, Ron Carter al bajo y Tony Williams en la batería.Son buenos en lo suyo, pero aparte de durar más de 12 minutos, me resulta pesado como ya he comentado al principio, así que se queda en el aire. Esto del free jazz no está hecho para mí. Cómo decía mi amigo Jóse, cuando escuchábamos a Pedro Iturralde, Jaime Marques, Tete Montolíu y otros en el Borbon Street de Diego de León o en el Whisky Jazz de Villamagna: "a ver si coge el hilo y vuelve al tema porque me parece que se ha perdido".
Para terminar, mi versión preferida, la de Ben Webster al saxo tenor en 1954. Para continuar el momento romántico anterior pero ya completamente entusiasmado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario